sábado, 31 de julio de 2010

Ron Edmundo Dantes 15 años


El ron proviene de la destilación de la caña de azúcar. El origen de la caña de azúcar se pierde en el túnel del tiempo, lo que sí se sabe con certeza es que los árabes la introdujeron en Europa a través de España y fuimos nosotros quienes la llevamos al Caribe donde el clima era mucho más propicio. Cuando los ingleses y los franceses se asentaron en las Antillas, al ser mucho más aficionados a los licores de alta graduación alcohólica potencian el cultivo de la caña de azúcar para abastecer de ella a sus naciones y destilarla para elaborar el ron. Eso sí, en el siglo XIX fuimos quienes le dieron su máximo esplendor al ron cuando las familias españolas que se dedicaban a la elaboración del ron en Cuba, captaron los conocimientos de la crianza de los vinos españoles y las aplicaron en la crianza del ron.

El titulo de este post hace referencia a un ron cubano que fue lanzado al mercado en el año 2007 durante el Festival de Habanos en Cuba y que tiene su destilería en Santiago de Cuba. Su producción es limitadísima, 3.000 botellas al año y pertenece a la colección de cigarros Montecristo, por eso aparece su logo en la botella.

CATA

La botella viene en un estuche metálico decorado con una réplica de la etiqueta.

Visual: Precioso ámbar oscuro tirando a caoba, cristalino y con abundante y densa lágrima.

Nariz: Ataque poderoso pero con exquisita elegancia. Notas a especias exóticas, algo de cítricos (piel de naranja), frutos secos tostados, torrefactos y maderas nobles.

Boca: Entrada melosa, amplia y extraordinaria. Equilibradísimo en todo su recorrido. Predominan las notas a vainilla, café, tabaco, frutos secos y cacao. Su final es largo como un día sin pan.

Me imagino que combinar este ron con un Montecristo, un Romero y Julieta o un Partagas tiene que ser una experiencia mística.

El único pero a este ron...un precio de altos vuelos (+100€).



martes, 27 de julio de 2010

A Fuego lento con... Javier Aznar




En visita a Valencia, la ciudad de la luz, me acerqué a uno de mis restaurantes favoritos el Sangoreneta en la burguesa calle de Sorní. Un restaurante pequeño, intimista, que practica una cocina mediterránea de autor con excelente materia prima, elaboración y presentación. La primera vez que estuve, al salir del restaurante, recopilé las sensaciones vividas con una corta pero concluyente frase “ha sido como un primer beso, difícil de olvidar”.

Quedé con Javier Aznar una persona que combina el duende tanto para la música como para la cocina y siendo sus dos pasiones cambia las baquetas por las cucharas dependiendo exclusivamente de la hora del día. Me propuso realizar un plato para la sección “A Fuego Lento Con” para personas curiosas por hacer algo diferente en casa. Como cuando estuve con Jose Maria en su Casa de Comestibles vamos a poner dos formas de realizarla. La versión sofisticada y la versión light. El plato elegido ha sido un mar y montaña, Bogavante y Papada de Cerdo con un puré de patata al aceite de Oliva.

Ingredientes para 4 personas:
2 Bogavantes pequeños, 2 lonchas gruesas de papada de cerdo, 2 patatas medianas, 100 cl. de leche de coco, 1 cucharadita pequeña de Curry, Lecitina de Soja, Aceite de oliva extra virgen y
Sal

En crudo, se descascarilla el bogavante reservando las pinzas y el cuerpo para esta preparación y guardando las cáscaras y la cabeza para otra preparación que pudiéramos hacer en un futuro próximo (consomé de bogavante, bisqué, un fondo para un buen arroz o unos buenos fideos finos en paella, etc.)

Se envuelve la papada en papel film y de aluminio y se introduce en el horno a unos 120º C hasta que esté muy melosa (3-4 horas). Enfriar y reservar.
Poner las patatas a cocer enteras con la piel, y una vez cocidas pasarlas por el pasapurés, ligar, con varilla, con un punto de nata líquida (una taza de café como mucho) caliente y aceite de oliva extra virgen.
Calentamos la leche de coco, le añadimos el curry y una cucharada de lecitina de soja.

Presentación:
En un plato hondo colocamos una cucharada de puré de patatas.
Mientras, la papada de cerdo, debidamente racionada (media loncha por persona), la ponemos a freír en abundante aceite de oliva hasta que cruja.
En una sartén caliente o una plancha hacemos el bogavante, debiendo quedar muy jugosas, tanto las pinzas como el cuerpo. Recogemos los jugos caramelizados en la sartén con un poco de agua.
En un sifón de cocina ponemos la leche de coco con el curry y la lecitina de soja para conseguir “un aire”.

Sobre el puré de patatas colocamos la papada, sobre ésta, medio bogavante por persona y su correspondiente pinza, colocamos alrededor del puré un cordón de los jugos recogidos y coronamos todo el conjunto con el aire de coco al curry.

La versión light o más sencilla, si no se quiere utilizar el sifón, es hacer una mayonesa ligera y una vez hecha le incorporamos el curry y la leche de coco, debe quedar densa pero ligera para salsear ligeramente por encima el bogavante. ¡Buen provecho!

Sangoreneta, calle Sorní 31 (Valencia) Tlf. 963.738.170






domingo, 25 de julio de 2010

Isleta del Moro Arraez





En la provincia de Almería a 40 kms de la capital, muy cerca de Los Escullos y dentro del Parque Natural de Cabo de Gata-Nijar, se encuentra un pequeño pueblecito pesquero de menos de 200 habitantes llamado "La Isleta del Moro Arráez". La población recibe su nombre una pequeña isleta situada a pocos metros de la playa, junto a un enorme peñón, que en la antigüedad era frecuentado por piratas del norte de África que visitaban esta costa para saquearla.


El nombre parece ser que procede del caudillo berberisco Mohamed Ar -Rais. La palabra árabe "ar-rais" significa "patrón de barco" y en el siglo XVIII ya aparecía escrita como "Jarraez".

La isleta del Moro es hoy un pequeño grupo de casas blancas donde se respira tranquilidad, sosiego, de esos pocos sitios que quedan donde el reloj camina sin prisas.




Sus gentes han vivido siempre de la pesca y ahora lo combinan con el turismo pero su forma de ser no ha cambiado. Una vez allí, no hay que perderse la visita al mirador de la Isleta, cercano a la plaza, que se llega tras subir una empinada calle rodeada de pequeñas casa encaladas de blanco inmaculado. Desde el mirador se observa el pueblo, sus embarcaciones marineras, el mar y al fondo los Escullos y los Dos Frailes.


La playa del pueblo se llama Playa del Peñón Blanco y se encuentra a la entrada del mismo.
Es una playa con cierta longitud, excelentes vistas del peñón y de la isleta y con fina arena un pelín oscura sin llegar a esas tonalidades negras zainas de, por ejemplo, la playa de la cala El Barronal en el cercano pueblo San José. Entre las actividades que se pueden realizar están el winsurf, ya que suele haber vientos muy favorables y el buceo en su fondo rocoso, bien por tu cuenta o realizando uno de los muchos cursos por niveles que tienen en el Centro de Buceo de la Isleta.


Si se desea practicar nudismo se puede ir al final de la playa, en la zona rocosa o mejor ir a la próxima playa en la Cala del Toro junto al Mirador de Amatista, hacia el norte en dirección a Rodalquilar, antiguo pueblo minero. El único pero es que para llegar a esta cala es que hay que coger el coche y al llegar a la zona darse un paseo a pie de 10/15 minutos.


Hablando de ese pequeño pueblo de Rodalquilar, sus calas, minas y paisajes han hecho posible el rodaje de famosas películas como El Misterio de Wells (Willem Dafoe & Paul Bettany), La Muerte Tenia un Precio (Clint Eastwood & Lee Van Cleef) o Indiana Jones y La Última Cruzada (Harrison Ford & Sean Connery) entre otras.



Tanto estas playas, como el Mirador de Amatista, en lo alto de un acantilado y azotado por el viento, como la Isleta a la que hace referencia el nombre del pueblo o las calderas volcánicas de la sierra de Cabo de Gata son lugares de gran belleza que se pueden visitar fácilmente porque se encuentran en sus alrededores.




La fama de su pescado fresco es bien merecida. Hay dos restaurantes en los que se puede degustar ese producto recién sacado del mar, bien frito, bien en caldereta. Son sitios sencillos, sin ningún tipo de lujo y con un servicio mejorable. Yo me sentí atraído por la terraza volcada al mar del Restaurante Casa Antonio que también dispone de hostal. La belleza de sus vistas y la frescura del producto hace que la comida sea memorable a pesar de otras carencias.




Como todos los sitios con encanto que son pequeños y tranquilos, Isleta del Moro Arraez es un lugar para disfrutarlo fuera de las aglomeraciones vacacionales. De no hacerlo así, solo podrás disfrutarlo a medias y estos lugares son para vivirlos con tanta intensidad que llegues a sentirlos como tuyos.





  • Restaurante Hostal Casa Antonio - telef.: 950389713 - 950389764




viernes, 23 de julio de 2010

Nº 209 Gin, La Sofisticación



La historia de la destilería Nº 209 comienza cuando William Scheffler compró una patente para un nuevo diseño de alambique en la ciudad de Nueva York en el año 1870. Al poco tiempo se decide marchar al Oeste un poco atraído por lo que suponía las oportunidades de negocio con la Fiebre del Oro como por alejarse del sentimiento de supervivencia que aun se vivía en el Este tras la Guerra Civil. Al llegar a California, establece una destilería en la bodega Krug en Santa Helena.

En 1880 compra su propia bodega en la misma ciudad, llamada Edge Hill. A continuación construyó su propia destilería y en 1882 el Gobierno Federal le otorgó la licencia con solo el numero del Registro, el 209. Se presentó a la Exposición de París en 1889, obteniendo varias menciones y una medalla. Pero tan exitoso comienzo no duró hasta nuestros días y en la primera mitad del siglo XX la destilería cerró.

Hace más o menos una década, un empresario llamado Leslie Rudd compra unos terrenos en Santa Elena para crear su propia bodega en el Valle de Napa. Era la antigua bodega Edge Hill. Varias semanas después de su adquisición encontró un granero de heno con unas palabras descoloridas en su puerta: “La Destilería Certificada 209 ". Este hecho le hizo cambiar la idea original, para dedicarse a volver a dar gloria al sueño de William Scheffler.

La N º 209 es una ginebra que tiene 5 destilaciones y en el destilado se preocupan mucho de separar las colas y las cabezas para que sea solo el corazón de la destilación lo que se escoja. Algunas de las plantas botánicas que utilizan son el Cilantro de Rumanía, Bergamota de Calabria, Cassia de Indonesia, Cardamomo de Guatemala o el Enebro de La Toscana.

CATA

La botella está muy bien presentada con detalles muy cuidados

Visual: Cristalino, transparente.

Nariz: Atractiva con suave fragancia, notas de enebro, cítricos (aunque no pude diferenciar la bergamota), raíz de lirio, regaliz, cilantro, especias y canela.

Boca: La entrada es agridulce, con mucho cuerpo. Hay notas cítricas dulces, regaliz y notas herbáceas. Muy larga y compleja.

No es una ginebra al uso con preponderancia del enebro, sino que está en un segundo plano. Lo que más resalta es el original exotismo de sus notas cítricas y especiadas. Esto tiene su controversia porque los puristas (a veces talibanes) podrían exclamar que una ginebra donde el enebro no esté claramente presente no es ginebra.

Pero fuera de posibles controversias, es una ginebra sofisticada, de esplendido sabor y con un precio algo exagerado (Sobre 45€)



jueves, 22 de julio de 2010

Taberner 2005


Cuando hablando de vinos suena la palabra Cádiz, inmediatamente la asocias con Jerez, con la Manzanilla, con el brandy, el amontillado y el oloroso, con la uva Moscatel, la Palomino o el Pedro Ximenez. Por eso cuando te ponen una botella delante de ti que viene de tierras gaditanas y no tiene nada que ver con todo lo anterior, te pica la curiosidad. Este es el caso de del vino Taberner, elaborado íntegramente con uva Shiraz y que en la segunda añada, la 2006, ha sido elaborado con uvas Shiraz, Cabernet Sauvignon y Merlot.

La bodega es un proyecto de un valenciano, Mariano Taberner Montoro, y fue levantada en los terrenos de la Finca Huerta de Albalá en el año 2001. En el 2002 se plantaron las primeras viñas y la primera añada que ha salido al mercado es ésta que hemos catado, la 2005. Se elaboraron dos vinos Taberner y Taberner 1 y están amparados en la denominación de Vino de la Tierra de Cádiz.

La Finca Huerta de Albalá se encuentra en Arcos de la Frontera y tiene una extensión de 91 Hectáreas, de las que 75 son viñedos: 60% de la variedad Shiraz, 20% Merlot, 10% de Tintilla de Rota y 10% Cabernet Sauvignon. La proximidad a la Sierra de Grazalema, curiosamente la zona de España donde más llueve, le da un microclima para crear vinos de gran poderío.

La recogida de las uvas se realiza a mano, rechazando cualquier tipo de maquinaria y al estar el viñedo alrededor de la bodega, facilita que durante la vendimia las uvas no se deterioren ya que la distancia es muy corta. Tiene una crianza de 12 meses en barricas de roble francés.

CATA

Presentación sencilla pero bonita con unos trazos representando un caballo tipo pintura rupestre en fondo blanco.

Visual: Precioso color picota de gama muy alta con ribetes morados. Buena lágrima

Nariz: Ataque potente. Notas de frutas negras maduras, chocolate, balsámicos, especias y vainilla.

Boca: Amplia, carnoso, con notas a frutas maduras, alguna nota dulce, muy equilibrado. Final largo y goloso predominado por las notas balsámicas.

Sus 15º están muy bien ensamblados, no te da la sensación de estar tomando un vino tan potente. Puede acompañar todo tipo de asados, guisos o platos de caza. Un tinto muy curioso en la tierra sagrada de los blancos. Precio: Sobre los 16€, buena RCP



sábado, 17 de julio de 2010

Bowmore Enigma 12 Años








Bowmore es una de las mas antiguas e importantes destilerías de Islay. Fue fundada en 1779 por David Simpson quien la vendió a James & William Mutter en 1837. En 1892 es comprada por J.R. Holmes que le pone el nombre de Bowmore Distellery Co. En 1925 fue adquirida por Sheriff’s Bowmore Distillery Ltd, adquirida en 1950 por William Grigor & Sons quienes la vendieron en 1963 a Stanley P. Morrison que le vuelve a cambia el nombre por Morrison Bowmore y comprada en 1994 por sus actuales propietarios, el grupo japones Suntory.





La destilería está situada entre la zonas Norte y Sur de la isla por lo que le confiere a su whisky algo de personalidad de ambas zonas. Es una perfecta mezcla entre la intensidad de los maltas de la zona sur como Laphroaig, Lagavulin y la suavidad de los maltas norteños como el Caol Ila o el Bunnahabhain. Dicha combinación añadida a las características del agua que aporta en su elaboración el Río Laggan es lo que hace que los maltas de esta destilería tenga una gran complejidad.

Con respecto al Enigma 12 Años, es un whisky envejecido 12 años en barricas de Jerez.

CATA

Presentación típica de esta destilería resaltando la palabra "Enigma"

Visual: Oro viejo, cristalino

Nariz: Entrada con poderío, notas salinas, turba, yodo, algas... todo esto te hace sentir como si estuvieras sobre un acantilado escocés en plena tempestad. También hay notas de miel, alquitrán, fruta madura (albaricoque), especias (nuez moscada), carbón y notas ahumadas. Muy complejo

Boca: Entrada armoniosa, equilibrada y golosa. Notas especiadas, salinas y algo de cítricos (mermelada de naranja, piel de limón). Postgusto largo y sedoso, con notas minerales, dulces y florales, lo que le hace muy fácil de beber

Sobre los 40€, buena RCP



viernes, 16 de julio de 2010

El Belisario, Potencia y Elegancia





Este vino riojano de limitadísima producción está elaborado por la bodega Agrícola Labastida. La familia Fernández Gómez es su propietaria, estando situada en el barrio judío de Labastida en la Rioja Alavesa. La bodega consiste en cuatro casas todas ellas ancestrales y en cuyos bajos existen calados (subterráneos o cuevas) que datan del siglo XIII.





El nombre es un homenaje a los primeros barcos que transportaron vino de crianza desde la zona de Labastida a Hispanoamérica, donde otra familia local, los Hermanos Quintano, fueron los pioneros de tal innovadora idea. El navío Belisario junto al San Antonio y los bergantines Primavera y Ana María fueron los primeros barcos que transportaron barricas y botellas. Todo esto sucedería en los primeros años del siglo XIX.

Es un vino elaborado con uva tempranillo solamente, de uvas provenientes de uno de los viñedos más antiguos de Labastida y obteniendo unos rendimientos por debajo de los 2.000kgs por Hectárea. Una vez despalillado, se fermenta en barricas de roble mixto verticales, donde se realiza la fermentación alcohólica. Para su clarificación se utiliza la clara de huevo.

Tiene una crianza de 14 meses en barricas de roble mixto (francés y americano). Una vez que se embotella se deja reposar siete meses en la bodega para continuación comercializarse.
La añada catada ha sido la 2005. La añada anterior fue catalogada por R. Parker con 92/100 puntos.

CATA:
Botella troncocónica de grueso vidrio. Correcta etiqueta de corte moderno.

Visual: Granate de capa alta con ribete cardenalicio. Limpio. Abundante y densa lágrima.

Nariz: Buena entrada. Notas frutales (melocotón)y bayas rojas (frambuesas), minerales (pizarra), balsámicos (menta, laurel) y especiados (nuez moscada)

Boca: Ataque de Panzer, potente, carnoso y con buena acidez. Quedan marcadas las notas de bayas rojas, las minerales y los especiados. Final largo, persistente pero con elegancia. No es el clásico Rioja, ni resulta agresivo sus 14,5 grados de alcohol. Es un vino para degustarlo con tranquilidad y dejarte una copa para después del postre y disfrutarlo en tertulia.

Para maridarlo, sin miedo, estará a la altura si lo acompañamos con platos poderosos.
Un tanque Panzer en potencia, con un recorrido elegante de Aston Martin.
Correcta la RCP, sobre los 35€.



martes, 13 de julio de 2010

A Fuego Lento con... Vincent & Sebastien



Aun con la reseca de la victoria española en Sudáfrica, me voy a ver a mis buenos amigos Sebastien y Vicent del Restaurante La Fayette. Está claro que el tema “Mundial de Futbol” no será tocado porque la Bleu no es que jugase mal, es que hizo el ridículo más espantoso. Antes de desarrollaros una receta veraniega de la zona sudoeste de Francia, de Bayona, que Vicent nos va a enseñar me gustaría daros unas pinceladas de este pequeño y exitoso restaurante. Se encuentra “escondido” en la calle Agés de Las Tablas en la zona Norte de la Capital. Sebastien es un bretón con humor inglés, afable, atento y detallista cuyos consejos sobre los vinos a tomar siempre son aciertos. Su socio Vicent es de Estrasburgo y es el alma mater de la cocina. Para describirlo, diré que es el Andrés Iniesta de los fogones, tímido y sencillo en su forma de ser y virtuoso en lo que hace.

La receta que hemos preparado, yo en el papel de atento pinche, ha sido una Sopa Frappée de Tomate.
Ingredientes para 5 personas: 700grs de Tomates maduros, 80 grs de Puerros, 1 Zanahoria grande, 1 ½ Chalota, 1 diente grande de Ajo, 1 ramita de Tomillo, 1 manojo de Albahaca, 1 hoja pequeña de Laurel, 25grs de Apio Bola (opcional), 50grs de Jamón Serrano picado, Sal, ½ litro de Caldo de Ave y 10cl de Aceite de Oliva Virgen Extra.

Troceamos finamente los tomates, cortamos en juliana puerros, zanahoria, chalota y apio bola o raíz de apio (no confundáis con el apio en rama) y picamos la albahaca. El caldo ya lo tendremos listo.

En una cazuela ponemos un buen chorretón de aceite de oliva virgen y ponemos el ajo. Antes de que se dore añadimos el jamón y cuando coja color echamos todos los ingredientes que hemos cortado y con precaución, salamos. Añadimos el laurel, dejamos rehogar un poco y a continuación incorporamos el caldo de ave. Una vez que “levante”, que rompa a hervir, lo dejamos a fuego medio durante 30 minutos.

Dejamos que enfríe un poco y lo pasamos todo, excepto la hoja de laurel, por la thermomix o una batidora y acto seguido lo tamizamos por el chino. Aquí está la madre del cordero. Cuando estemos colando la sopa debemos exprimir bien lo que nos queda en el chino para que suelte toda la esencia.

Una vez colado, lo ponemos en un bol y lo dejamos en el frigo. La receta es “Sopa frappée” por lo que al servirla debe de estar muy fría.
Para su presentación, hemos cogido una vieira limpia, la hemos marcado a la plancha y la hemos colocado sobre tres trocitos de tomate y coronado con un poquito de cebollino fresco. Voilá, bon appétit!

PD. La Fayette es un local para 24 o 26 comensales, por lo que conviene reservar (Tlf. 912606912).



Lisboa (2ª Parte)



Lisboa, vieja ciudad
Llena de encanto y belleza
Siempre hermosa al sonreír
Y al vestir
Siempre esbelta
El blanco velo de añoranza
Cubre tu rostro, hermosa Princesa

(Amalia Rodrigues,“Lisboa Antiga”)


En esta segunda parte vamos a recomendar lugares de comer o beber que merecen una visita, al menos. Solo pondré lugares donde se puede disfrutar de la cocina lusa, tradicional o moderna pero, como siempre, excluiré otras cocinas de una forma intencionada por buenas que sean. Visitar un país es conocer sus costumbres, su gente y su cocina.



Dicen que desayunar en París consiste en tomar un excelente croissant con un mal café y en Roma, un excelente café con un mediocre croissant. En Lisboa, se puede disfrutar tanto de buen café como excelente pastelería. La verdad que en todo Portugal, es un placer.






Para desayunar podemos disfrutar de las muchas “confeitarias” que hay en Lisboa, pero si tenéis la oportunidad hay una especial: Antiga Confeitaria de Belem, que fue inaugurada en 1837 y que se encuentra en la calle Belém 84-92. Son los que crearon los famosos “Pastéis de Belem”, riquísimas tartaletas de un hojaldre crujiente, rellenas de crema caliente, nada empalagosa, y cuya superficie está ligeramente caramelizada. Otra ventaja de desayunar aquí es que ya se puede aprovechar para visitar el Museo Nacional de Carruajes, la Torre, el Monasterio de Los Jerónimos y si se tiene tiempo el Jardín Botánico Tropical ya que todos estos lugares quedan alrededor. Una curiosidad, en portugués lo que ellos llaman nata, es lo que nosotros decimos crema, tenerlo en cuenta cuando os den estos exquisitos “ Pasteis “ de Nata de Belem. 






Otras opciones, A Brasileira (Rua Garret 77 – Chiado), Pasteleria Versailles desde 1922 en la Avenida de la República, 15 (Metro Saldanha), el Café Nicola (Plaza del Rossio – Baixa) con más de 200 años a sus espaldas o la Confeitaria Nacional fundada en 1829.













A la hora del aperitivo, hay muchos sitios, por lo que nos vamos a cambiar de barrio para acercarnos a la Baixa y disfrutar de las terrazas de dos de sus emblemáticas plazas, la del Rossio o Praça de Pedro IV y la Praça da Figueira muy cercanas una de la otra. Aquí se disfruta de una buena caña de cerveza portuguesa, que suelen estar bien tiradas.


Es curioso, que el personal de cafetería y restauración sigue en manos de personal portugués, por lo que son esos camareros atentos y detallistas que había en España hace unas cuantas décadas atrás.


A la hora de comer, es llamativo que se come con horario británico pero se cena como en España, yo tengo dos sitios cercanos por los que siento predilección. Los dos son informales y del tipo “Cervejaria” : Ramiro y Pinoquio.


La “Cervejaria Ramiro” es una marisquería que desde los años 50 viene ofreciendo su excelente producto en un ambiente informal, un tanto ruidoso pero absolutamente recomendable. Mesas muy juntas, carta de vinos justa, menaje sin alardes, mantel de papel encima de uno textil, que te lo cambian dos o tres veces durante la comida. Servicio atento, servicial y eficiente, que hace que las mesas roten con rapidez. De precio, excelente Relación Calidad/Precio. Por ejemplo, Almejas al estilo Bulhao Pato (con cilantro, ajo y pimienta10,30€), Gamba Tigre Gigante a la Plancha (11€), Centolla de 850grs (17,51€), una botella de Alvarinho Muros Antigos (11,60€). Av Almirante Reig 1, Tlf. 21 8851024


“Cervejaria Pinoquio” está situada en la misma Plaza de Restauradores y aunque engaña con ese nombre de restaurante italiano, es un excelente sitio para tomarse un sabroso y abundante Arroz Caldoso con Langosta, Gambas y Almejas (19,5€). Auténticos camareros de la vieja escuela: rápidos, serviciales y simpáticos. Las mesas estan tan pegadas que se pueden intercambiar las conversaciones. Mantel de papel, menaje de cuando Mozambique era colonia portuguesa, las copas de vino blanco tipo flauta y congeladas pero todo es perdonable cuando te sacan el producto. La comida es mejor acompañarla de cerveza o sangría, porque la carta de vinos es floja. Para llegar en Metro, parada Restauradores. Praça dos Restauradores 79, Tlf (351) 21 3465106

Si no sois personas perezosas os sugiero, también, coger un ferry durante 15 minutos para comer frente a Lisboa, sobre la orilla izquierda del Tajo. Me refiero al Restaurante Ponto Final en Cacilhas. Se coge el ferry en Cais do Sodré (en la Baixa, se puede ir en la línea Verde del Metro). Las vistas de Lisboa desde la terraza, el Arroz de Tamboril (Arroz con pescados) o su bacalao a la brasa, memorables (Precio medio 25€). Cais do Ginjal 72, Cacilhas, Lisboa 21-2760743.


En el Barrio de la Alfama, Lautasco donde se puede disfrutar de un cocido portugués, sardinas, Carne de Cerdo a la Alentejana , Bacalao de diferentes formas o una Caldeirada de Pescado. Excelente RCP (desde 20€). Por las noches cierran cocina a las 22:30. Beco do Azinhal 7 A, Tlf. 218860173


En el Bairro Alto está Bota Alta que es restaurante y casa de fados. Imprescindible hacer reserva. Probar el bacalao Real, exquisito. (Precio medio 30€) Travessa da Queimada 35-37, Tlf. 21 342 7959



En la Baixa, Casa do Alentejo, dentro de espectacular edificio comida típica del Alentejo. Raciones abundantes y excepcional RCP sobre 20€. Rua das Portas de Santo Antão 58, Tlf. 21 3405140

Y un restaurante de batalla, pequeño, con mesas cubiertas con mantel de papel, ambiente bullicioso y largas colas en horas punta es el Restaurante Cabaças. Además de comer los platos típicos de la cocina lusa tienen muy buena carne a la piedra. Muy buena RCP, precio medio 25€. Rua das Gáveas 8.



Y los Domingos, que hay muchos sitios cerrados, una Churrasquería brasileira Sabor Mineiro, bulliciosa, enorme, con buen producto. Recordar que el truco de los “rodizios” es no ponerse ciego con los aperitivos y dejar hueco para las carnes. Por 19,50€, sin bebida, tienes toda la comida que puedas digerir. Av. Jose Malhoa 16-D, Tlf. 217 269 218


LA CENA

Dos restaurantes de cocina de autor, que solo abren para las cenas: Alma (Calçada do Marqués de Abrantes 92, Tlf. 213963527) y 100 Maneiras (Rua de Texeira 35, Tlf. 210990475). Son dos restaurantes pequeños, con ambiente cool. El primero te da dos opciones de menú muy bien elaborados a 28 y 39€ además de la carta. Tiene la magnífica posibilidad de maridar los platos con vinos por copas. El segundo solo ofrece un menú cerrado por 30€. Todos los menús no incluyen bebida.


Senhora Mae,cerca de la catedral,en el Barrio de Alfama. Pequeño restaurante, que dispone de una coqueta terraza en verano, con cocina que aunque es de raíz claramente lusa le hace guiños al mediterráneo con creativas presentaciones. Ambiente romántico, relajante gracias a la luz de las velas y a una música de jazz, blues y otras tendencias pero siempre con ritmos suaves. Mesas no muy distantes ya que el local no da para despliegues. Correcto menaje, carta de vinos interesante con el inconveniente de que no tienen armario climatizado y el botellero está a temperatura ambiente. Personal atento. En verano tienen la cocina abierta hasta las 2 de la madrugada. (Precio medio 30€) Largo de São Martinho 6, Tlf.218 875 599.

En el Bairro Alto tenemos también, el restaurante/galería Imperio dos Sentidos. Cocina de autor, fusionando las cocinas portuguesa e italiana y con algunas referencias de cocina vegetariana. Con una decoración minimalista sus paredes siempre están vestidas con exposiciones artísticas y cuyas obras se pueden comprar. Carta de vinos no muy extensa pero con precios correctos. Buena música de fondo y cocina abierta hasta las 2am. Precio medio 40€. Rua de Atalaia 35, Tlf. 213431822.



Bica do Sapato es un restaurante que posee tres zonas‚ más la terraza exterior: cafetería‚ restaurante y sushi bar. Uno de los socios es, ni más ni menos, que John Malkovich, así que este restaurante de ambiente, propietarios y clientela chic le podemos poner la etiqueta de lugar para ver y ser visto. Decoración muy lograda, excelentes vistas al Tajo, servicio mejorable y cocina para un aprobado justito, sin grandes sorpresas ni desengaños. Un extra, que está al lado de la discoteca LuxFrágil, muy de moda por lo que se puede hacer doblete. Precio medio 45€. Av. Infante Dom Henrique, armazém B, (Cais da Pedra a Santa Apolónia) Tlf. 351 218810320



En el apartado “cartera sin prejuicios ni temores” tenemos Tavares, que ya lo hemoss subido al blog, Eleven del afamado Joachim Koerper (que durante 10 años dirigió el restaurante Girasol de Moraira), único estrella Michelín de la ciudad. Un restaurante de diseño tanto en la cocina como en la decoración, con excelentes vistas de la Lisboa nocturna. Espectacular bodega. Precio medio +90€. Marquês de Fronteira/Jardim A.Rodrigues, Tlf.(21)3862211.

Restaurante Gambrinus al lado de la Plaza de los Restauradores. Un restaurante de cocina y decoración clásica y ambiente muy formal. Excelente materia prima en mariscos, pescados y en temporada, caza. Servicio de la “vieja guardia”. Las Crepes Suzette, dignas de probar aunque asuste su precio. Precio medio +65€. Tiene una barra donde se puede tapear tipo “Restaurante Combarro” de Madrid. Rua das Portas de Santo Antao 23-25, Tlf. 213421466

En el Barrio de Alcántara en un antiguo almacén cerca de las "docas" se encuentra el Alcántara Café, que abarca restaurante y bar para tomarte unas copas hasta las 2am. Un lugar de “gente guapa”, con una sofisticada decoración y bastante buena cocina. Evoca el pasado de la histórica zona portuaria, pero decorado de una forma que no deja indiferente a nadie. Precio medio 50€. Rua Maria Luisa Holstein 15, Tlf.21 3637176.

lunes, 12 de julio de 2010

¡¡España Campeona!!


Este post no tiene que ver con vinos, viandas o viajes pero si de placeres. El placer de ver el nombre de España en lo más alto, el placer de celebrarlo con la gente más variopinta que uno se puede imaginar y el placer de ver a toda España unida. Todo esto me reconfirma mi creencia de que tenemos los peores políticos de toda Europa, gentuza que vive en otro mundo diferente al resto de los ciudadanos. Pero no vamos a ponernos a pensar en la desgracia de tener esta casta política, ayer fue una noche para celebrarlo en la calle, con gente desconocida, abrazarte a personas que posiblemente no vuelvas a ver y de sentir como se te humedecían los ojos por todo lo que estabas percibiendo. Hoy es el momento de celebrarlo con las amistades, tiempo para abrir una buena botella de vino y brindar por la rojigualda. Mi brindis por vosotros, Del Bosque & Co., porque ayer, 11 de Julio del 2010, nos habéis hecho ser unos privilegiados, los mejores del mundo.










viernes, 9 de julio de 2010

Lisboa (1ª Parte)




Viajar a Lisboa es una experiencia que quedará impresa en la memoria del visitante. Ese aire de romanticismo decadente de sus cafés, edificios y tranvías. Los aromas hermanados del Atlántico con el rio Tajo que se siente mientras paseas por sus calles adoquinadas, la animación de sus plazas repletas de apasionadas conversaciones, su gastronomía, la melancolía que el fado transmite cuando se escucha en los barrios de Madragoa, Alfama o Bairro Alto. Un continuo sentir de cómo palpita el corazón de esta anciana, pero majestuosa dama, llamada Lisboa.

Dice la leyenda que fue Ulises quien la fundó, en su regreso a casa tras la guerra de Troya. Pero fuera de leyendas, posiblemente fueron los fenicios quienes fundaron Lisboa, sobre el 1100 a.C. y la llamaron Olissipo, nombre derivado de Allis Ubo, que significa "puerto seguro" en fenicio. Por lo tanto, es la segunda capital europea por antigüedad tras Atenas, incluso antes que Roma.

Su situación geo-estratégica hizo que fuera una ciudad muy deseada por todos los pueblos que tuvieran intereses tanto militares como de comercio marítimo. Por ella pasaron fenicios, griegos, cartagineses hasta que en el 205 a.C. fue conquistada por el Imperio Romano, llamándola Felicitas Iulia e incorporándola a Lusitania. Después pasaron godos, suevos y visigodos y con estos últimos se llamó Ulishbona. En el año 714 fue conquistada por las huestes islámicas de Abd al-Aziz ibn Musa que se sintieron mejor que en su casa y se quedaron alrededor de 400 años, desde el siglo VIII al XII. La ciudad pasó a llamarse Al-Ushbuna y fue una ciudad portuaria tan importante que la fortificaron, siendo el primer núcleo del Castillo de San Jorge. Aun quedan vestigios de este periodo musulmán en el Barrio de Alfama.







La reconquista definitiva de la ciudad se produjo oficialmente el 1 de Noviembre de 1147 gracias a Don Alfonso Henriques, primer Rey de Portugal, apoyado por la flota de la Segunda Cruzada. Una de las primeras decisiones que se tomó fue convertir la gran mezquita de siete cúpulas, en lo que hoy se conoce por la Catedral de Lisboa, la Sé.


En 1373 la ciudad fue saqueada por Enrique II de Castilla, por lo que el rey luso Fernando I hizo construir unas murallas como protección para sus 40.000 habitantes. Después, la peste negra arrasó la ciudad y la economía se derrumbó hasta la llegada de la prosperidad en la Era de los Descubrimientos, entrados ya en el siglo XV.


El 26 de enero de 1531 la ciudad sufrió un terremoto en el cual murieron miles de personas. Aun así, las riquezas obtenidas con el comercio de especias, junto con las que procedían de Brasil, convirtieron a la ciudad en una potencia comercial europea.

Pero Lisboa aun no había conocido su mayor desgracia. Sobre las 9:30am del día 1 de Noviembre de 1755 fue sacudida por un gran terremoto que destruyó más del 75% de la ciudad, sólo se salvaron los barrios de Alfama y de Mouraria, protegidos por la colina de São Jorge y los de Ajuda y Belém. Para que os hagáis una idea de su magnitud, ha sido catalogado como 9/10 de la escala Ritchter. A su vez, el terremoto originó tres maremotos que arrasaron 50 minutos más tarde la costa lisboeta en particular y el sur de Portugal en general y causando estragos en ambos lados del Océano. La ciudad quedó arrasada entre el terremoto, los Tsunamis y los incendios que estuvieron activos casi una semana. Las bajas mortales se calculan cercanas a los 100.000 personas en la zona de Lisboa donde vivían 275.000, pero también los hubo en Marruecos y en España, donde se contabilizaron más de 4.500, la mayoría en la costa del Golfo de Cádiz.



En el verano de 1998, esta vieja Dama, tuvo otro gran susto cuando un incendio causó grandes daños en el bohemio barrio de Chiado. Parece ser que todo comenzó en una tienda de la Rua do Carmo y llegó a alcanzar la famosa Rua Garrett, afectando a negocios, viviendas, oficinas e importantes edificios del siglo XVIII. Tras su restauración el Chiado vuelve a ser lugar unos de los lugares favoritos para disfrutar de restaurantes, teatros, librerías, tiendas de moda y cómo no locales nocturnos donde disfrutar hasta el amanecer.


QUE VISITAR


Lisboa tiene cinco barrios que son de visita obligada: Belém, Alfama, La Baixa, Chiado y Bairro Alto. En Belém, junto al cauce del río Tajo y al otro lado de la autopista IP7, se encuentra algunos de los monumentos más bonitos de Lisboa como son La Torre y el Monasterio de los Jerónimos (s.XVI) donde está enterrado Vasco de Gama, el Jardín de Ultramar, el Museo Nacional de Coches y el Monumento a los Descubridores.




Los otros cuatro barrios están contiguos unos de otros. Alfama, el barrio más alejado del mar que como ya os comenté anteriormente le protegió de los tsunamis del terremoto de 1755, por lo que conserva el viejo trazado urbanístico de kasbahs árabe, con calles estrechas que parten del Castillo de San Jorge en fuerte desnivel, con trazados irregulares y escaleras empinadas por lo que es adecuado visitarlo con calzado cómodo. Desde la Edad Media fue la zona donde han vivido pescadores y obreros. Aquí a demás de recorrer sus pintorescas callejuelas se debe visitar el Castillo de San Jorge, la Catedral, la iglesia de la Madre de Dios, la de San Vicente de Fora y el Palacete “Casa dos Bicos”del siglo XVI.







La Baixa, el corazón de la ciudad, su nudo principal de comunicaciones. Arrasado en el terremoto, fue reconstruido bajo las directrices del Marqués de Pombal que reorganizó el barrio como un damero, con un estilo muy racionalista. Su calle central es la Rua Augusta que acaba en la Praça do Comercio, un espacio abierto al estuario donde estuvo el Palacio Real.






La Plaza del Rossio o Praça de Pedro IV, la Iglesia Nossa Senhora da Conceiçao, edificio manuelino, la Praça da Figueira (donde antes del terremoto estaba el Hospital de Todos Los Santos), el Teatro Nacional de Dona Maria II, la Estacion do Rossio, la Praça dos Restauradores o la Iglesia de São Domingos, son lugares para visitar.





Chiado, el corazón la Lisboa romántica y literaria con el recuerdo en sus calles y cafés de artistas de renombre como Fernando Pessoa, Jorge Barradas o Almada Negreiros. Desde la Baixa y utilizando el elevador de Santa Justa se llega a este barrio bohemio, bullicioso, inolvidable. Este elevador, situado en el cruce de las ruas de Aurea y Sª Justa, es una torre de 45 metros de altura que fue construido en 1902 por un discípulo de Eiffel, Raoul Mesnier du Ponsard. Como visitas culturales tenemos el Convento do Carmo de estilo gótico y en ruinas desde 1775, las iglesias de Nossa Senhora de Loreto o Nossa Senhora dos Martires, la Opera de Lisboa o el neoclásico Teatro de São Carlos.






Bairro Alto, con sus calles empinadas, por su situación en lo alto de una de las siete colinas de la ciudad, callejuelas y callejones sin salida en un trazado caótico. Es un barrio que hermana la antigüedad y la historia con la modernidad y la sofisticación, donde confluye una mezcla multicultural de personas que forman un caleidoscopio interesante tanto para visitar como para vivir.




También es el corazón de la Lisboa noctámbula, donde la zona de Rato es su epicentro. Un barrio que te incita a recorrértelo a la aventura, sin planos ni mapas, para sin prisas patearlo entre cañas de cerveza, cafés, tés, libros y moda. 




Como dijo Pessoa “La vida es lo que hacemos de ella. Los viajes son los viajeros. Lo que vemos no es lo que vemos, sino lo que somos”.